cuando algo posee una cualidad,
la mención de esta es innecesaria,
se nota en el aire,
las palabras confunden,
hay que leer donde no hay letras
y escuchar donde no hay palabras.
cuando algo posee una cualidad,
la mención de esta es innecesaria,
se nota en el aire,
las palabras confunden,
hay que leer donde no hay letras
y escuchar donde no hay palabras.
botes de colonia vacíos,
toallas sin ningún juego,
extensa colección de farmacología
y un evidente y dañado ego,
de repente un piso de sólo un cuarto,
una extraña colección de cepillos dentales,
el vacío de las paredes cubierto por cuadros con imágenes que Mundomueble ha elegido por ti,
dos nuevos delantales,
la explosión ha eclipsado a la belleza,
la sutileza se perdió en el conjunto,
junto ideas mientras miro dentro y fuera,
¿qué ha pasado? para todos mismo rumbo,
las cadenas han llenado escaparates
que varían como la noche y el día,
a esta ritmo ya no hay liebre que se escape,
a este ritmo de tutú y comisarías,
y aunque en boca el sabor sea agradable,
en la traquea el corazón está agrietado,
pero eso la verdad que ya no importa,
porque nadie ve la traquea palpitando
intenté abarcarlo todo
y me quedó el tejado a medias,
prometí que volvería
y esperaste hasta el viento te llevó,
soñé con un instante,
un altar sin despedidas,
un lugar donde no busque una salida,
corrí por cada calle
con tu nombre arrepentido,
rebusqué por todas partes
pa encontrarte donde el viento te llevó,
en un pantano del norte
te encontré llena de heridas,
me abrazaste y al oído repetías,
qué más da,
unos rezan los disgustos,
yo los bebo,
que más da,
he tenido mil en mano y ya no quiero escapar,
porque aquí todo es distinto,
qué más da si el tiempo vuela
mientras vuele aquí contigo.
un huevo de codorniz con la personalidad muy marcada,
un camión cisterna con la cara de John Travolta,
una mosca de la fruta que te cae bien,
un edificio de la URSS de color azul capri,
un cable USB-C como regalo de boda,
el sol parpadeando al ritmo de “Oops!…I Did it Again”,
un tulipán triumph como animal de compañía,
una litera doble de Ikea que viene ya montada,
un martillo de Playmobil de hierro fundido,
el Monumento Nacional del Monte Rushmore tallado en la Sierra de San Donato,
un saltamontes que habla portugués,
Shaquille O’Neal en paro,
una pipa de crack para bajar la comida,
una plantación de tabaco como destino de peregrinación,
un clip de acero inoxidable guiando al ejercito francés en La Batalla de Bailén,
El David de Miguel Ángel expuesto en un centro comercial,
un ácaro depredador de vacaciones en el Mediterráneo,
un cañón de barco apuntando a tu ventana un lunes a primera hora,
una caja de cerillas publicitaria de Repsol,
el gran monumento de la colina Mansu saludándote tras una ingesta de ácido,
un cigarro de liar sin filtro,
el estado de Alaska conquistado por Taiwan,
una moneda de un euro llena de mierda,
el puente de Brooklyn en Egipto,
un pez araña dando las campanadas,
una ballena azul adicta al agua con gas,
una cachorro de rottweiler cantando “Runaway” de Kanye,
el castillo de Drácula lleno de turistas,
la bola de la punta de un boli Bic de compras en el black friday,
un cohete de la NASA confirmando que la tierra es cuadrada,
un miligramo de lorazepam si te suscribes a mi canal,
el río Amazonas lleno de sirenas, orcas y tiburones toro,
una aguja de coser de un cm de longitud,
nace del silencio y del vacío una lagrima
que cálida recorre tu mejilla recordando
que el sol volvió a salir esta mañana y tiritando
ha quebrado todo lo malo que brotaba del
pasado,
un comienzo nuevo para todos,
guardar en el recuerdo el recuerdo de unos
pocos,
quitarle las espinas a una rosa para tocarla
y volver a reventar a carcajadas en tu cama,
volvimos de la muerte para avisarte que no hay
nada
más bonito que este amanecer trepando por tu
espalda,
la vida en un segundo, un minuto de silencio,
un abrazo y tus manos por mi cuerpo,
te quiero y lo siento
por no saber decirlo,
te quiero y lo siento,
lo bueno es un suspiro,
ayer tenía 15 hoy tengo 27,
he vuelto a las montañas
para ver si el tiempo vuelve
y no ha vuelto,
quizás esa es la magia,
vuelvo a cerrar los ojos
y aparece la nostalgia.